Síndrome de Tourette y tics nerviosos: Cómo enfrentarlos

El Síndrome de Tourette es una enfermedad poco frecuente en los niños, que se caracteriza por tics nerviosos que producen bruscos movimientos y también sonidos. En los casos más graves, pueden producirse varios de ellos al mismo tiempo.


Aparece entre los tres y diez años de edad, aunque si tu hijo tiene tics nerviosos no quiere decir necesariamente que sufra este síndrome.

Hay otros síntomas además de los tics, como el déficit de atención e hiperactividad (TDAH), conducta obsesiva, o problemas de aprendizaje. Si además tiene algún familiar con este síndrome diagnosticado, es más posible que tu hijo también lo tenga.

Los tics suelen darse más cuando la persona está cansada o ansiosa. Por eso lo mejor es mantener un ambiente de tranquilidad y mucho cariño en casa, conversando con amigos, escuela y familiares para que también le brinden su apoyo y comprensión. No es recomendable tampoco que trates de instruir a tu hijo para que domine los tics, pues esto lo somete a una tensión adicional que podría empeorar las cosas.

Lo mejor es consultar la opinión de un médico neurólogo o pediatra. No se suelen recetar medicamentos salvo en casos graves o según lo considere el doctor. Hay estudios que concluyen que las neurotoxinas botulínicas (NTBo) son de cierta eficacia en estos tratamientos.





Los síntomas suelen disminuir mucho al llegar a la adolescencia. Y al llegar a adulto, menos de la mitad de ellos mantienen algún tic notorio.

Via: FamilyDoctor.org

Imagen: El Alamo

Comentarios