Muchos niños esperan que papá o mamá estén distraídos para escabullirse en su dormitorio y rebuscarles carteras y ropa en busca de dinero. En algunos casos la reacción es demasiado severa y en otros casos los padres de familia se niegan a aceptar esta realidad, empeorando aún más.
Para resolver este problema de la mejor manera es necesario tener en cuenta por qué sucede, cómo evitarlo y como actuar cuando lo descubras.
Para resolver este problema de la mejor manera es necesario tener en cuenta por qué sucede, cómo evitarlo y como actuar cuando lo descubras.
Por qué me roba mi hijo
Las causas de que un niño robe tiene mucho que ver con problemas en su crianza. Si vive en un ambiente donde se habla del dinero como único camino a la felicidad, sentirá que debe tenerlo a cualquier precio. Si no se le brinda cariño ni se le escucha, aprenderá a hacer todo sin consultarlo. Si no se le permite expresarse libremente y se desconfía siempre de él, aprenderá a ser desconfiado y tener dificultades para relacionarse con su comunidad. El robo también será una manera de llamar la atención y de protestar por no ser atendido.
Pero el robo de dinero en los niños también puede tener un origen psicológico que es necesario tratar acudiendo a un psicólogo o psicoterapista.
Cómo prevenirlo
Es normal que de muy pequeños los niños tomen cosas que no le pertenecen hasta que entiendan lo que significa la propiedad ajena, hacia los 5 años de edad. Para evitar que esto continúe cuando crezca, es necesario inculcarles el respeto a las cosas de los demás y el concepto de pertenencia, conversar con ellos, escucharlos y darles toda nuestra confianza y apoyo.
Qué hago si lo descubro robando
Existen muchos consejos para eliminar esa mala costumbre en nuestros hijos, pero hay algunas pautas que los padres de familia pueden utilizar:
- Hazle ver que robar esta mal, con firmeza pero sin insultos ni castigos.
- Pregúntale por qué lo hizo.
- Indícale que robar no le va a traer nada bueno, sólo complicaciones.
- Si tu hijo ha robado fuera de casa, ayúdalo a devolverlo.
- No lo etiquetes ni lo hagas sentir como un caso perdido. Si lo haces, se resignará a ser así y lo seguirá haciendo.
- Pregúntate si le estás dando la debida atención a tu hijo, si le das cariño y tiempo, si lo escuchas y lo estimulas a expresarse.
- Luego de llamarle la atención, evita recordarle el tema otra vez.
Si aún así tu hijo sigue robando, entonces las causas pueden ser más profundas. Aquí es necesario acudir a consulta con un especialista. El lo evaluará y te indicará la terapia que corresponda. Pero en todas ellas, el apoyo y comprensión de la familia será la parte más importante; tu hijo no será el único que deberá cambiar.
Recursos para padres ante su hijo que roba: ParentsReachingOut
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