Qué deben hacer los niños en caso de incendio

Hay muchas formas en que un incendio puede iniciarse en casa en cualquier momento. Por eso, es necesario educar a nuestros hijos sobre lo que deben y no deben hacer cuando vean que algo se quema en casa.


Prevención primero


Esto vale para ambos, padres de familia y niños. Por cuenta de los papás, está el evitar colocar fósforos y materiales inflamables al alcance de los niños. Además, debemos instruir a nuestros hijos sobre los peligros del fuego, e indicarles que no deben jugar con los cerillos, aparatos eléctricos o tomacorrientes.

También es necesario programar revisiones periódicas de las instalaciones eléctricas y de gas en casa, cableado y conexiones a tierra. Colocar sistemas contra incendios en la casa, como alarmas y aspersores que se activen al detectar el humo del fuego.

Una excelente idea es coordinar con la estación de bomberos más cercana para realizar actividades de educación con los niños.

Pero lo más importante es nunca, nunca dejar solos a los niños en casa. Si no es posible llevarlos con nosotros, encargar a alguien de confianza para que los cuide, pero nunca dejarlos solos, por más preparados que estén para incendios. Son muchos los casos de niños que han fallecido encerrados en sus casas por una vela encendida o porque estalló un balón o una cañería de gas.

Para respirar mejor






El humo no solo impide ver la salida, sino también puede intoxicarnos al inhalarlo. Por eso, se debe respirar a través de un trapo empapado en agua. Este servirá de filtro al humo y reducirá el riesgo de intoxicación y de un desmayo, que podría evitar que tu hijo escape.

El trapo húmedo también puede servir para abrir las puertas cuyas cerraduras están calientes. Sin embargo, esto último tiene sus riesgos ya que una puerta caliente significa fuego al otro lado. Lo mejor es en esos casos buscar otra salida.

Escape en caso de incendio


Los niños deben tener muy en claro las rutas de escape en caso de incendio. Si viven en casa, es mejor que sus habitaciones estén de preferencia en el primer piso, así tendrán más posibilidades de ganar la calle con rapidez.

Pero también es posible que por las diferencias de presión o por efecto del fuego sobre las puertas, estas se atasquen. En estos casos, los niños deben salir por las ventanas del primer piso. Por eso es necesario que todas las ventanas sean fáciles de abrir para los niños y enseñarles a hacerlo.

Siempre pegados al suelo


Un gran porcentaje de personas que mueren en incendios no es debido al fuego, sino a la inhalación de humo tóxico. Para evitar respirar el humo, los niños deben siempre permanecer pegados al piso y avanzar arrastrándose o gateando, ya que el humo siempre tiende a subir.

Pedir ayuda


El objetivo principal de tu hijo debe ser siempre salir de casa. Una vez que lo haya logrado, debe llamar a un teléfono de emergencia o al número de un familiar. Estos datos son muy importantes que los tenga memorizados o guardados en el móvil, si lo tiene a la mano. Pero al salir, lo más probable es que los vecinos o sus amigos los bomberos le ayuden con eso.

De esta manera, tus hijos estarán mejor preparados para reaccionar adecuadamente en caso de incendio. Practica con ellos estas recomendaciones y ganarás valiosos segundos que pueden ser la diferencia entre la vida y la muerte.


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