La etapa escolar es aquella en la que se da con mayor frecuencia el contagio de piojos. En la etapa de Kinder o Jardín las posibilidades son aun mayores, debido a la tendencia de los niños a jugar en el jardín o en la arena, donde estos insectos se desarrollan fácilmente.
Las estaciones calurosas son el momento en el que debemos tomar más precauciones e informarnos mejor acerca de todo lo que podemos hacer para combatirlos y prevenirlos.
Los piojos buscan el calor y suelen instalarse en el cabello de los niños, pues se alimentan de la sangre del cuero cabelludo. Sus sitios preferidos de anidamiento son la nuca y detrás de las orejas. Ahí ponen sus huevos, llamados liendres que, al estar fuertemente pegadas al cabello por una sustancia cementosa que fabrica la hembra, son muy difíciles de remover. Su capacidad de multiplicarse es grande. Cuando la hembra es fecundada puede poner hasta 10 huevos al día. Es por eso que, apenas descubras el contagio en tu hijo, debes empezar el tratamiento de inmediato.
Primero debes mojar bien el cabello y aplicar el champú especial hasta obtener abundante espuma, masajeando por unos minutos. Luego enjuagas. A continuación se aplica una crema desenrredante que contenga piretrina, un componente que ayuda a hacer más efectivo el tratamiento. Espera diez minutos para que surta efecto y enjuaga. El peine de dientes estrechos es lo que sigue, con lo cual te asegurarás de retirar los liendres y piojos muertos. Cuando el cabello esté totalmente seco, aplica la colonia y déjala durante seis horas. Se recomienda que el procedimiento se realice en la noche.
Una vez que has curado a tu hijo, lo primero que desearás es que no vuelva a suceder. Para eso, es necesario tener en cuenta algunos tips.
Las estaciones calurosas son el momento en el que debemos tomar más precauciones e informarnos mejor acerca de todo lo que podemos hacer para combatirlos y prevenirlos.
Los piojos buscan el calor y suelen instalarse en el cabello de los niños, pues se alimentan de la sangre del cuero cabelludo. Sus sitios preferidos de anidamiento son la nuca y detrás de las orejas. Ahí ponen sus huevos, llamados liendres que, al estar fuertemente pegadas al cabello por una sustancia cementosa que fabrica la hembra, son muy difíciles de remover. Su capacidad de multiplicarse es grande. Cuando la hembra es fecundada puede poner hasta 10 huevos al día. Es por eso que, apenas descubras el contagio en tu hijo, debes empezar el tratamiento de inmediato.
Primero debes mojar bien el cabello y aplicar el champú especial hasta obtener abundante espuma, masajeando por unos minutos. Luego enjuagas. A continuación se aplica una crema desenrredante que contenga piretrina, un componente que ayuda a hacer más efectivo el tratamiento. Espera diez minutos para que surta efecto y enjuaga. El peine de dientes estrechos es lo que sigue, con lo cual te asegurarás de retirar los liendres y piojos muertos. Cuando el cabello esté totalmente seco, aplica la colonia y déjala durante seis horas. Se recomienda que el procedimiento se realice en la noche.
Una vez que has curado a tu hijo, lo primero que desearás es que no vuelva a suceder. Para eso, es necesario tener en cuenta algunos tips.
- Nada de compartir peines, cepillos, gorros ni vinchas con nadie.
- Avisa a su Jardín o Colegio para que se tomen las medidas del caso.
- Vuelve a realizar el tratamiento a la semana, a manera de prevención.
- Lava con agua caliente todas las prendas y ropa de cama, y en general todo lo que tenga contacto con el cabello de tu hijo.
- Todos los que viven en la casa deben hacerse el mismo tratamiento.
Comentarios
Publicar un comentario
¡Comenta aquí!