Riesgos de la televisión para bebés

Para la gran mayoría de papás y mamás puede resultar demasiado que exista una televisión exclusivamente dedicada a los bebés. Más aun cuando hemos escuchado durante años los posibles efectos nocivos de este aparato en el desarrollo de los niños.



El hecho es que no sólo ya existe, sino que se mantiene. Eso quiere decir que tiene audiencia, que hay hogares que encienden la tele y ven su señal. De lo contrario, como todo negocio, cerraría.

Es necesario entonces tener siempre en cuenta las diversas discusiones y críticas sobre el tema y lo que podría significar para el bebé, para tomar las previsiones del caso:
  • Inacción: la actividad física, tan necesaria en un niño, se vuelve vital en los menores de 2 años. Mantenerse al frente de una televisión los limita.
  • Desconexión con su entorno: Los sentidos del bebé estan diseñados para absorver todo lo que los rodea. En la televisión, su atención estará concentrada en la vista y no en otros sentidos, como el tacto, tan importantes para desarrollo de infinidad de nociones.
  • Sociabilidad: un niño frente al televisor rechaza cualquier interacción con otras personas en ese momento. Si esto se hace un hábito desde bebé, su desadaptación desadaptación social podría causarle un grave perjuicio.
  • La televisión para bebés le presenta infinidad de actividades, pero en ninguna tiene participación real. El argumento de la "enseñanza virtual" podría ser un espejismo en estos casos.
  • En salud, aumenta el riesgo de obesidad. Los hábitos de alimentación se alteraran mucho antes de haberse afianzado o incluido siquiera en su rutina. La exposición a la luminosidad de la televisión también es un factor que influirá en su vista.
En todo caso, la comodidad de los padres -y no el beneficio de los pequeños- puede haber sido la verdadera razón para su creación y su aceptación. Pero sólo basta ver el rostro enajenado de nuestros hijos frente a la tele para saber que algo no está bien con eso.

Imagen: BebesMundo

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